martes, 8 de abril de 2008

"¡Vámono mi arma!"

Esa es la frase que más escuché la pasada Semana Santa.

Siempre he visto la Semana Santa leonesa, y este año tocó pasarla en Sevilla. Acostumbrado a procesiones de muchos pasos, la Semana Santa Sevillana me sorprendió porque sus procesiones generalmente tienen dos pasos, en general primero un cristo, y para cerrar, la virgen. Las figuras son preciosas, y sus caras tienen mucha expresividad, y los tronos sobre los que van montados brillan, dorados. También me sorprendió por la cantidad de nazarenos que pasan entre los pasos, miles en ocasiones, lo que hace que la espera entre las imágenes en ocasiones se haga demasiado larga.

Al contrario de lo que creía, las procesiones son muy silenciosas. Muchas de ellas ni siquiera llevan banda de música, y el silencio tan sólo se rompe de vez en cuando por alguna saeta.

Pero sin duda lo que más llamó mi atención fue el ritual que acompaña a cada uno de los pasos. En lugar de braceros, como en León, a los que pujan el paso se les llama costaleros, pues la carga la llevan sobre el costal, no sobre el hombro. Se encuentran situados debajo del paso, por lo que no se les puede ver. Y cada vez que levantan el trono después de un descanso, a eso se le llama “levantá”. Siempre, en el exterior del paso, un hombre serio, vestido de traje oscuro, es el que indica a los costaleros el momento de parar, o el de la “levantá”, o cómo deben caminar para hacer un giro. Siempre con voz fuerte, en medio del silencio. Y a cada “levantá” anima a sus costaleros a que sigan llevando el paso con pie firme, y a que dediquen esa “levantá” a la virgen, a Sevilla, a algún cofrade amigo… acabando siempre, justo antes de izar el paso sobre sus hombros con un “¡Vámono mi arma!”.

2 comentarios:

Una astrofísica por el mundo dijo...

A mí me pasó lo contrario que a ti: acostumbrada a la Semana Santa sevillana, ver los braceros me sorprendió un montón... No hay nada como mirar fuera para descubrir que otras formas son posibles :-)

JAC dijo...

El hombre serio que dirige el paso se llama "capataz". Otra forma que se escucha muchas veces antes de la levantá de la Virgen es: "Al sielo con ella, to por igual valientes"

En mi pueblo hay tanto costaleros como portadores (braceros los llamas tú), dependiendo del paso.

Eso sí, los que más molan son los romanos ;) que te diga Patxi.